¿Cuánto me deposito Nicolás?.

Da tristeza como la gente está pendiente de lo que recibe del gobierno. ¿Cuánto me depositó Nicolás en mi cuenta?. Es la pregunta obligada del primero en la fila del cyber o el abuelito preguntándole al nieto que carga el celular inteligente. Tres lochas hacen la diferencia en los gestos de complacencia y no mirar el futuro. Viejos, adultos en plenas facultades para trabajar, inclusive muchachos como zombis recibiendo limosnas. Antes de Chávez se vivía con decencia, había trabajo, funcionaban los servicios. Ahora… pobres, miserables y sin futuro.